Su esposa acaba de dar a luz a dos hermosas niñas, son gemelas. Cuando el doctor me dijo eso... Sentí como mis ojos se ponían llorosos de felicidad.
-¿Puedo verlas ahora? -Pregunte con mucha emoción en verdad quería ver como eran, si se parecían a mi o como a su hermosa madre.
-Si claro que puede verlas. Me respondió el doctor de nuevo con una sonrisa.
Cuando entre vi a Jeny arrecostada en la cama, con las dos pequeñas bebes, me acerque a las niñas con una sonrisa, las pequeñas eran idénticas.
Cargue a una de las niñas y las apegue a mi pecho, dándoles de mi calor, mire a Jeny y decidí preguntarle:
-¿Como se llaman las niñas?
-Aun no les he puesto nombres... Porque no se las pones tu? -Dijo Jeny con una sonrisa.
-Hoy es 27 de septiembre, les pondré Jenyfer y Jenyceth. -Dije
-La que tienes cargada es la mayor. -Dijo Jeny.
-Bueno... Ella sera Jenyceth a la menor le pondremos Jenyfer, yo quería que nacieran en abril pero bueno...
-Jajaja de acuerdo Gordon pensé que seria difícil pero no.
Escuchamos que alguien abría la puerta, era la enfermera.
-Buen día señores Trumper necesito que me den los nombre y apellidos de las pequeñas criaturitas, ya que necesitamos registrarlas hoy mismo.
-Mire enfermera, esta niñita que tengo cargada se llama Jenyceth Paola Trumper Lavigne, y la que tiene mi esposa se llama Jenyfer Paola Trumper Lavigne.
-Muy bonitos nombres, bueno... Gracias y... Me retiro.
Después de algunos meses las niñas crecieron... Y alrededor de siete años, mis niñas ya tenían esa edad. Pero las cosas no nos salían bien últimamente mi esposa y yo andábamos mucho de peleas, y siempre procurábamos no hacerlo delante de las niñas, o que ella se quedaran viendo esas escenas eso a ellas las lastimaban, un día de escuela, mande a la niñera para que las fueran a recoger, ya que yo me dedicaba a ser profesor de música en una escuela muy reconocida en Alemania, yo decidí dejar el país de mi esposa y de mis hijas para venir a mi país osea Alemania para que las niñas aprendieran cosas nuevas así que ellas y yo vivíamos en Alemania. Llegue de mi trabajo y Jeny comenzó a formarme una cantaleta, sinceramente yo me aburrí y le dije:
-Mira Jeny... Te voy a decir algo... Yo a ti te amo mucho, demasiado pero... Este matrimonio ya no esta funcionando así que mejor sera que nos divorciemos.
-Si eso es lo que quieres Gordon, pues no te voy a obligar, pero yo... Me llevare a mis hijas para nuestro país me oyes? Me las llevare a Canadá si las visitas... bien. Y si no... También yo ya me harte de todo esto y creo que si seguimos así esto no terminara en nada bueno.
-Pero Jeny... No me puedes alejar de ellas.
-Tu mismo lo decidiste Gordon, ya me pediste el divorcio, yo te lo daré pero la custodia de las niñas, ni loca, ni muerta te las voy a dar me oyes? Me las llevare a Canadá y mejor vete de la casa, que hasta arrendados nos toca vivir.
Yo solo tome todas mis cosas y las empaque, cuando iba saliendo de la habitación me encontré con las niñas.
-¿Papi y esas maletas? -Pregunto Jenyceth
Yo me agache hacia ella para tener su altura.
-Niñas esto es... Algo complicado de explicar y mas porque ustedes solo tienes siete añitos y no comprenden los problemas que tienen su madre y yo.
-Papi yo no quiero que te vayas.
-Hija... -Trague saliva- Yo nunca las voy abandonar, escúchenme bien nunca las voy abandonar ustedes deben empacar porque tienen que viajar a Canadá, prométanme que cuando estén allá... No van a estar tristes si no felices, porque eso es lo que se merecen y muchas cosas mas de acuerdo?
-Si Papi, pero... Te voy a extrañar mucho -Dijo Jenyfer
-Bien yo también las voy a extrañar mucho, las amo.
Me separe de las niñas tome las maletas y lo que mas me dolió en mi alma fue cerrar la puerta, estaba consciente de que no las volvería a ver por un buen tiempo, me hospede en un hotel, y se me hacia un poco cerca para ir a la escuela... Después de algunos meses, hubieron varios cambios en mi vida, me estaba yendo demasiado bien, ya tenia mi casa propia, todo era un cambio menos para mi corazón, me sentía destrozado al ver que no tenia mis hijas conmigo. Pero aun así seguí adelante, en estos momentos iba pasando por un restaurante . Decidí entrar y pedir un fetuccini.
Cuando iba a empezar a comer, se me acerco una mujer elegante, rubia, alta y con unos lentes, estaba muy bien presentada.
-Buenas tardes, espero que no le moleste que me siente aquí con usted. -Me dijo
-No se preocupe no me molesta para nada. -Tome el tenedor o (trinche) envolví en fetuccini haciendo un circulo y lo metí a mi boca, mientras la mujer me miraba un poco embobada- ¿Que tengo?
-No nada. es solo que se ve un poco ansioso al comer fetuccini ademas... Es la primera vez que vengo a este restaurante Jajaja... Ademas se ve que es un poco delicioso así que pediré uno.
-Jajaja de acuerdo... Y si esta delicioso.
La mujer pidió un fetuccini, después de algunos minutos empezó a comer mientras tanto pensaba en hacerle una conversación.
-¿Y como te llamas? -Me pregunto... La mujer se me adelanto.
-Me llamo Gordon Trümper -La mire- ¿Y tu?
-Simone... Simone Kaulitz.
-Oh ya veo... ¿Y a que te dedicas?
-Bueno... Soy secretaria en una empresa, pero estoy un poco preocupada debido a que el contrato se me acabo y no se que trabajo, podría conseguir para mantener a mis hijos -Dijo ella con una sonrisa.
-Oh que mal, un hijo o... Los hijos son lo mas importante para la vida de los padres
-Si y mucho, y tu. ¿A que te dedicas? -Pregunto ella.
-Soy profesor de música.
En fin para no darle mas vuelta al asunto, ella y yo seguimos conociéndonos y después de algunos meses, nos enamoramos y llego el día en que le propuse vivir con ella para que no le faltara nada, pero había un pequeño problema, no sabia si yo a sus hijos les caería bien. Era de noche y tenia que buscar a Simone en una tienda. Cuando se subió a mi auto, noto que estaba algo nervioso.
-¿Gordon que tienes? -Me pregunto
-Solo estoy un poco nervioso, que tal si ellos no me aceptan como su padrastro? A parte tu estas divorciada, no lo se Simone... Creo que... No estoy preparado para eso aun.
-Si. Si lo estas vamos...
-Sera que si les llevo algunos les caeré bien?
-Si... Creo... No lo se... Inténtalo a ver que pasa.
-De acuerdo... Te parece si...Vamos primero a tu casa... Mejor, quiero haces esto de una buena vez, pero antes respondeme algo...
-Dime
-¿Que edad tienen?
-Tienen 7 años.
-7 años? Los dos tienen 7 años?
-Si Gordon mis niños son gemelos.... Y
-¿SON QUE? -Frene al auto haciendo que nos fuéramos hacia adelante.
-¿GORDON? ¿QUE DEMONIOS TE PASA? ¿PORQUE TE PUSISTE ASÍ? TEN CUIDADO Y SI SON GEMELOS HAY ALGÚN PROBLEMA CON ESO? -Grito por el susto casi moríamos-
-No amor es solo que... No lo sabia -Rodé la llave y encendí al auto de nuevo seguimos nuestro camino - Bueno ademas tampoco te pregunte.
-Bien... Si son gemelos, el mayor se llama Tom y el menor es Bill, mis niños pueden que sean iguales pero por dentro son extremadamente diferentes, son fáciles de reconocer cual, es cual, sus gustos, su forma de ser, de hablar, todo pero por fuera son idénticos.
-Mmmm sera interesante poderlos conocer, y ¿Que les gusta hacer a ambos?
-Bueno... A Tom le gusta mucho el Hip-Hop a pesar de ser tan pequeño, le gustaría mucho aprender a tocar la guitarra, y no se mas, y a Bill pues cantar, ahora a sus siete años, les gustaría ser cantantes, ahora se ha dedicado mucho a hacer canciones.
-¿Tienes algunas fotos de ellos dos? -Pregunte.
-Si claro déjame sacar algunas y te las muestro. Mira el es Bill.
-Ohhh se ve que es un niño muy bueno.
-Si el es mi niño, los dos son buenos, muy activos, Tom siempre defiende a su hermano pequeño Bill.
-También se ve que es un niño bueno.
-Bueno un poco...
-Como que un poco Simone.
-Tom a veces suele ser muy rebelde... Mira este es Tom.
-Mmmm si su corte de cabello lo hace ser muy diferente.
-Mmmm mira Gordon ya llegamos.
Cuando llegamos nos bajamos del auto, Simone toco el timbre, la puerta se abrió pero no vi a nadie... Simone entro mientras yo me quede solo afuera.
-Gordon entra.
Entre y me senté en el sofá Simone subió las escaleras, mientras yo me quedaba mirando todo... Rápidamente dirigí la mirada hacia el techo...
-Mierda... Estoy realmente cansado -Susurre
Sentí unos pasos provenientes de las escaleras, pero no preste atención, cerré los ojos, note que los pasos se habían desaparecido, después de 10 segundos, escuche otros pasos pero mas pesados, también provenían de las escaleras, rápidamente abrí los ojos, cuando vi 2 figuras pequeñas, uno en frente de mi y otro en las escaleras, me miro tan seriamente, los 2 pequeños vestían iguales, las camisetas, los pantalones, los zapatos, el corte de cabello, color todo era idéntico solo vi a uno de ellos que tenia un lunar en la mejilla, y sus camisetas tenían sus nombres, Bill el que tenia en frente, y Tom el que estaba en las escaleras, y susurre:
-Bill y Tom.





ohh gracias hey pero pasame algunos tuyos quiero leerlos por fis
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